A través de un comunicado, Huachipato sostuvo que «tras un exhaustivo análisis de lo resuelto por la Comisión Anti distorsiones sobre la aplicación de derechos antidumping a las importaciones de barras y bolas de acero chino, el directorio de la Compañía Siderúrgica Huachipato (CSH) se ha visto obligado a tomar la dolorosa decisión de suspender -por tiempo indefinido- las operaciones siderúrgicas de la empresa en Talcahuano».

Tras valorar el anuncio de la Comisión, precisaron que «lamentablemente, las tasas definidas son menores a las solicitadas por la compañía y, además, diferenciadas por productor y exportador. Ello, debido a que todas las empresas productoras son controladas por el Estado chino y, además, son de gran tamaño, por lo que en la práctica se podría derivar la totalidad del acero que se exportará a Chile desde la empresa a la que se le aplique la menor sobretasa, eliminando cualquier posibilidad de competir en igualdad de condiciones».

La industria del acero local está sumida en una crisis que ya es de larga data, algo que había sido alertado en reiteradas ocasiones por la gerencia, directorio y trabajadores de esta planta ubicada en Talcahuano, región del Bío Bío.

La afectación tenía relación con una “competencia desleal” por parte del acero llegado del gigante asiático, que es hasta un 40% más barato.

Huachipato genera, hasta ahora, 20 mil empleos directos e indirectos; y tenía estimado que al día estaba perdiendo “cerca de US$1 millón”, ya que por lo explicado anteriormente la operación estaba siendo “insostenible” en el tiempo.

Julio Bertrand, presidente de Siderúrgica Huachipato, relató que en más de 70 años miles de trabajadores de la firma pusieron “todo su conocimiento, talento y energía al servicio del país”.

“Lamentamos la pérdida de una compañía siderúrgica emblemática para la región del Bío Bío y Chile. Huachipato es el principal productor de acero para la minería en Latinoamérica, particularmente en los dos principales mercados de producción de cobre, que son Chile y Perú”, expresó.

Durante el periodo de cese, la compañía comenzará a tener diálogos con sus grupos de interés, al mismo tiempo en que “cumplirá cabalmente con todos sus compromisos con colaboradores, clientes y proveedores”.

En el caso de los trabajadores, precisó, incorporará un paquete de medidas que incluye compensación económica, capacitación en habilidades relevantes, soporte para la reinserción laboral y oportunidades para educación adicional.

“Quiero agradecer especialmente a nuestros trabajadores, a sus representantes, y a las autoridades regionales y gremios industriales que han apoyado a Siderúrgica Huachipato. Tomamos hoy una decisión muy dolorosa, pero que llevaremos a cabo con la convicción de que hemos hecho todo lo que está en nuestras manos para mantener una industria estratégica para la región y el país”, cerró Bertrand.