Elisa Loncón, doctora en Humanidades y en Literatura, fue electa en la primera jornada de trabajo de este organismo encargado de redactar una nueva Constitución chilena.
La Convención Constitucional de Chile se instaló el domingo en Santiago, a pesar de los disturbios que obligaron a una breve suspensión de la sesión.
Esta sesión inaugural de la convención tuvo lugar en el antiguo Congreso Nacional de la capital. Los constituyentes disponen ahora de nueve meses, prorrogables por tres más, para discutir y generar un nuevo texto, una de las principales demandas del estallido social de octubre de 2019.
En una decisión cargada de simbolismo y reflejo del espíritu de la nueva Convención Constituyente inaugurada este domingo en Chile, Elisa Loncón fue elegida presidenta del órgano que debe redactar una nueva Constitución.
Los 155 miembros de la Constituyente eligieron este domingo a Loncón, una mujer indígena de 58 años, para presidir el órgano que creará la nueva Carta Magna, la que debe sustituir a la actual, heredada de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
Loncón, una profesora, lingüista y activista mapuche -la etnia indígena mayoritaria en Chile-, fue elegida por mayoría absoluta (96 votos) en segunda vuelta en la sesión inaugural de la Convención, que se detuvo durante casi una hora por la protesta de un grupo de constituyentes tras los enfrentamientos en el centro de Santiago entre policía y manifestantes.
Con este acto ,Chile inicia un proceso histórico que para muchos supone pasar la página de la dictadura. Será además la primera Constitución en el mundo redactada por un órgano partitario y la primera vez en la historia del país que participe el sector indígena, representativo del casi 13% de la población, y que nunca había sido reconocido en la ley fundamental.