residentes hacen fila para recoger agua de un camión durante el racionamiento de agua en La Calera, en las afueras de Bogotá, Colombia, Archivo

Bogotá vuelve a aplicar medidas más estrictas en el racionamiento del agua ante la situación crítica de su sistema de suministro, que podría llegar a diciembre con un 22 % de su capacidad de almacenamiento.

Los preocupantes bajos niveles de los embalses que garantizan el agua a Bogotá, tras una sequía prolongada y la falta de lluvias significativas en la cuenca alta de los ríos, tienen en alerta a los habitantes de la capital colombiana, ante la posibilidad de medidas más severas de racionamiento si la ciudad “alcanza el día cero” en sus embalses.

Desde que los embalses llegaron a menos del 50 % en abril, a consecuencia de un fenómeno de El Niño prolongado, Bogotá empezó a aplicar cortes de agua diarios por sectores para garantizar el servicio. La medida se aplicó hasta el 30 de junio, cuando la ciudad alcanzó la meta de consumo de 15 metros cúbicos por segundo por hogar.

«No las vamos a cambiar. Creemos que han tenido un impacto positivo muy cerca de lo esperado. Estamos convencidos de que con un esfuerzo adicional podremos llegar a esas cifras ideales que hemos planteado, como lograr un consumo de 15 metros cúbicos por segundo”, señaló el alcalde Carlos Fernando Galán a la prensa.

La medida, que afecta a más de ocho millones de personas en Bogotá y una decena de municipios aledaños, consiste en restringir por 24 horas cada nueve días el servicio de agua, por lo que cada habitante suma tres días sin servicio al mes.

Se trata del primer racionamiento de agua por sequía que vive la capital colombiana en 40 años y que es producto del fenómeno de El Niño, con déficit de precipitaciones y aumentos en las temperaturas.

La restricción es evaluada cada 15 días por las autoridades locales para definir si se mantiene, se aumenta o se relaja, dependiendo del consumo diario en la ciudad y del nivel de los embalses que la abastecen.

El alcalde señaló que la víspera se registró un consumo en toda la ciudad de 15,36 metros cúbicos por segundo, más de dos metros cúbicos por debajo de lo que era el consumo promedio antes del inicio de las restricciones, lo que calificó como “positivo”.

El nivel de los embalses no ha aumentado significativamente y el viernes se mantenía en 16,27%, según el reporte de la autoridad ambiental. La alcaldía se ha trazado como meta llegar en abril al 20% del nivel. Sin embargo, el alcalde consideró que la tendencia es positiva por la combinación entre el ahorro en el consumo y las lluvias que se han registrado en los últimos días.

El nivel de los embalses preocupa a las autoridades en todo el país, especialmente porque los que sirven para las hidroeléctricas se han mantenido en mínimos históricos. El martes el gobierno anunció un programa de incentivos y recargos en las tarifas de energía de los hogares y comercios para promover su uso eficiente y evitar el primer racionamiento eléctrico en 30 años.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *