El presidente de Colombia considera que su par argentino Javier Milei busca “destruir o aplazar” el proyecto de “integración” en América Latina. Expertos opinan que Milei procura posicionarse como un líder regional, a sólo tres meses de su asunción al poder.
El impasse reciente entre los presidentes de Argentina, Javier Milei, y de Colombia, Gustavo Petro, que culminó con la expulsión de diplomáticos argentinos de Bogotá, es el último capítulo de una ya larga lista de altercados de corte personal e ideológico con líderes de la izquierda en la región del hoy inquilino de la Casa Rosada, incluso desde su época de candidato.
Expertos valoran que el nuevo presidente argentino podría estar buscando posicionarse como líder regional entre los gobernantes alineados o cercanos a su proyecto liberal y de la derecha, en momentos sensibles para la izquierda latinoamericana.
En una entrevista con el canal CNN, difundida esta semana, Milei calificó a Petro como un “asesino terrorista”. El gobierno colombiano afirmó que “repudia” sus señalamientos, que “han deteriorado la confianza” binacional y expulsó a diplomáticos de la embajada argentina en Bogotá.
Cuando apenas era candidato, en agosto pasado, Milei ya tuvo sus cruces con Petro, que ahora se han repetido, al opinar que un socialista es “una basura, un excremento humano”, a lo que el líder colombiano contestó: “esto decía Hitler”.
Al ganar la presidencia argentina en noviembre, Petro estimó que era “triste” el triunfo de quien consideró parte de la “extrema derecha” de la región.
Milei, quien asumió su cargo en diciembre, puede estar dando pasos para “marcarse” como líder regional de los jefes de Estado cercanos al sistema liberal, opinó desde Argentina el analista político y abogado Bruno Tondini.
En ese grupo, estarían sus pares de Uruguay, Luis Lacalle Pou, y de Paraguay, Santiago Peña, valoró Tondini, profesor de Derecho Internacional de la Universidad Nacional de La Plata y director de la especialización en Derecho Tributario y Finanzas Públicas de la Universidad Católica de la Plata.
El presidente argentino busca «asumir protagonismo a nivel regional», en América Latina, aseguró. «No hay que menospreciar la estrategia internacional que puede asumir el presidente Milei, en todos los ámbitos”.
A su entender, Milei aspira con sus posturas y comentarios sobre otros presidentes, a que Argentina “reasuma un posicionamiento global mucho más fuerte” como contraparte del bloque de liderazgos representados en los presidentes de izquierda de Brasil, México, Colombia e incluso Venezuela.
“Es el inicio de un posicionamiento regional”, remarcó Tondini, quien advirtió que las palabras de Milei pudieran buscar “dinamitar” la integración de dirigentes izquierdistas.